The story’s still the same

If you are the dealer, I’m out of the game
If you are the healer, it means I’m broken and lame
If thine is the glory then mine must be the shame

You want it darker
We kill the flame

There’s a radiant darkness upon us

I’ll do what I can to be a confident wreck
Can’t feel this way forever, I mean
There wasn’t any way for anyone to settle in
You made a slow disaster out of me

You were a kindness when I was a stranger
But I wouldn’t ask for what I didn’t need
Everything’s weird and we’re always in danger
Why would you shatter somebody like

Testigo

Hablan de otras tierras a explorar
Algo tan lejano y tan real
Pero estoy tan lejos esta vez
Y ya estoy cansado de volver

Soy testigo de algo que no importa
Rompe el corazón vivir así
Si hay algo que anhelo, es despertar
Si hay algo que quiero, es la verdad

Creo estar despierto de verdad
Me aferro a los recuerdos que se irán
No importa cuánto más pueda correr
No importa qué tan lejos pueda ver

Soy actor de algo que no importa
Rompe el corazón decirlo así
Si hay algo que anhelo, es despertar
Si hay algo que quiero, es la verdad

Nota 10

Aparentemente, la imagen que proyecto hacia los demás no es igual a la que tengo de mí mismo. Los que me rodean me suelen ver como un tipo centrado, que se toma las cosas con calma para tratar de llegar a las mejores soluciones posibles, y que generalmente está seguro de lo que dice o hace. Por dentro me siento siempre descontento, inseguro de mí mismo y disconforme con todo lo que hago. Tengo un montón de actitudes autodestructivas que trato de controlar de forma desesperada para reducir mi autoboicot todo lo que pueda. Reconozco que es inútil entristecerse o deprimirse por ciertas cosas, e incluso aunque no me siento deprimido tan seguido, no puedo evitar ni la tristeza ni la apatía. Tengo un estado de ansiedad constante, como un hambre de estar siempre un paso adelante de donde estoy, y por eso nada de lo que hago me contenta, siempre quiero lo que viene después de esto. Me pongo a conciencia en situaciones angustiantes, y cuando algo me resulta bien no lo disfruto, porque tiendo a pensar que no me lo merezco.

Sin embargo hay cosas que me hacen sentir menos roto. Sigo amando, escuchando, reflexionando y haciendo. Quizás todos nos sintamos un poco como yo sé que me siento, pero puede que no todos se den cuenta, o que no lo quieran asumir. Es posible que todos nos creamos un poco un fraude, y que hagamos todo lo posible por esconderlo, para que los demás no vean nuestro verdadero yo, sino algo más parecido a lo que aspiramos a ser.

Nota 9

Qué vergazo que es esto de que el tiempo de un día no alcance para hacer todo lo que quiero hacer, o que no lo haga alcanzar porque me detengo en otras cosas que sirven a manera de excusas, de demoras temporales. A esta altura da igual. El tiempo se puede hacer, el tema es si realmente quiero o puedo, más allá de que también quiera o pueda otras cosas que necesitan de ese tiempo.

A lo mejor vivo demasiado tranquilo y con pocas preocupaciones importantes como para realmente sentir esa necesidad acuciante de hacer esas cosas. O a lo mejor me estoy durmiendo en los laureles de la especulación por todo lo que hice y sé que soy capaz de hacer. Lo cierto es que la capacidad no sirve de nada, y que lo que importa son los hechos, como estar escribiendo esto aunque simultáneamente me muera por hacerlo y le tenga pánico a la hoja en blanco, al bloqueo, a esa sensación de creerme poco original o comunicativo. Miedo a que no los demás vean lo que hago por la posible burla o falta de entendimiento.

Hay una pregunta que todos deberíamos hacernos: ¿qué es lo que quiero? Me gustaría ser capaz de atreverme a preguntarle eso a cada persona con la que hablo. Sé muy bien que lo que yo quiero para mí es entendimiento. Mi psicóloga parece incapaz de comprender esto, o de creerme en el mejor de los casos. El entendimiento con personas individuales me interesa, pero no es mi meta principal. Me encantaría que pudiera haber completo entendimiento con mi pareja, mi familia, mis amigos, que mis viejos pudieran estar vivos para lograr también un entendimiento con ellos; que algo así pueda darse sería algo muy importante para mí, pero no es mi fin último. No, yo quiero el entendimiento con todas las personas, a manera de grupo. No sé con qué tiene que ver, pero no es una falta de amor en la infancia, ni rencor porque alguien me haya herido o abandonado. La psicología insiste en buscar causas en relaciones sentimentales del pasado, como si el identificarlas pudiera solucionar algo que ellos ven como un problema, sin saber a ciencia cierta si lo es. No todo lo que a uno lo deja disconforme o le trae dolores de cabeza o angustia es un problema. Al menos esto es una motivación, pero se puede convertir en problema cuando se pierden los objetivos, cuando no hay plan, cuando no se sabe cómo manejarlo. Creo que gran parte del trabajo necesario consiste en tener presente el por qué de que uno haga lo que está haciendo.

Despierto

Cuando se duerme ese otro que soy yo es que realmente puedo empezar a despertar. A despertar y ser quien quiero, ir a donde deseo, construir a partir de lo que me paraliza cuando no soy yo, incluso después de haberse echado por tierra todo lo que creí tener.

Ese otro es el miedo, es el odio, es la destrucción de mis deseos. Es quien me encierra y me dice que afuera no hay nada para mí, quien me siembra esas dudas que no desaparecen, pero a las que ya no temo cuando despierto: la soledad, el silencio, la distancia, la decepción, el dolor.

Es posible que este despertar sea en realidad otro sueño, pero no me importa. Si el lugar en donde creo estar está dado vuelta, aún así parece más cómoda esa inversión que conformarse a una vida de estar despierto pero inmóvil en la oscuridad. Si es un sueño, al menos en el sueño puedo escapar y encontrar algo distinto de lo corriente, de lo que me llena de desesperanza en mis momentos de vigilia.

Puedo soñar otros lugares, otros mundos. Otras lunas, suelos rojos. Mundos donde nadie necesita hablar para comunicarse, donde la comprensión y el entendimiento son inmediatos, donde no es necesario adivinar ni ocultar intenciones, deseos, sentimientos, pensamientos, donde no se puede ser juzgado por ellos.

Un lugar donde las dudas se convierten en una mera sombra.